martes, 22 de julio de 2014

LA COMUNICACIÓN EN LOS CENTROS EDUCATIVOS

La dama del armiño obra de Leonardo da Vinci hacia 1489




Ignacio Pardo Luzardo*


Publicado en la página 16 del periódico La Provincia el lunes 21 de julio en la sección de opinión.

Ahora que ya ha finalizado el curso académico y es hora de hacer recuento de la labor realizada en el mismo, pondremos en una balanza los éxitos y los fracasos acontecidos, para que en la planificación del próximo curso, se corrijan aquellos puntos débiles y se potencien las fortalezas, para mejorar el funcionamiento del centro.

A todos nos están pidiendo en nuestros puestos de trabajo más eficiencia y eficacia en nuestras actuaciones diarias, para que de este modo el trabajo realizado sea más productivo en aspectos cuantificables y de calidad, ahora bien, si intentamos trasladar esos conceptos de eficacia, eficiencia, calidad y productividad en un centro educativo, resulta que debemos tener en cuenta parámetros más complejos y sensibles para poder aplicar esos principios, puesto que la materia prima con la que se está trabajando son personas y más concretamente niños, adolescentes y jóvenes con sus respectivas familias. Esta es la teoría, ahora la realidad es mucho más compleja, puesto que cada centro es un mundo y lo que sirve para uno, para el Colegio que está al lado no lo puede aplicar, los motivos pueden ser innumerables y todos son válidos, pero lo cierto es que debemos tender a aplicar los principios que antes se mencionaron, si perder de vista la personalización de la educación, la atención individualizada, el alcanzar las competencias básicas en cada una de las áreas, el inculcarles a los alumnos herramientas de aprendizaje y valores que les abrirán puertas en el presente y en el futuro.

Por lo visto, nadie quiere darse cuenta que los centros educativos son una institución que debe funcionar como una maquinaria perfectamente engrasada, en donde confluyen infinidad de personas con planteamientos de vida totalmente distintos y que deben confluir en un único objetivo que es educar y formar a personas para el futuro. Pero para que toda esa maquinaria pueda funcionar, debe existir una perfecta comunicación entre todos los miembros que participan en la Comunidad Educativa, como dice Marta Albadalejo Mur “para que una institución educativa pueda educar con eficacia, debe estar engrasada con una buena comunicación”.

No me cabe la menor duda, que una buena comunicación, es un elemento crucial para cualquier empresa o centro educativo que quiera tener éxito en el área que se desenvuelva. Y como siempre ocurre, solemos valorar más las cosas cuando las perdemos, y si se pierde la comunicación en cualquier centro de trabajo, eso supone en un colegio, que va proa al marisco. Pero claro la comunicación que señalamos es un elemento fundamental en cualquier relación humana, mucho más importante, si lo que pretendemos es ponernos de acuerdo en la forma de actuar y de funcionar de cara a terceras personas como son los alumnos y sus familias, que precisan necesariamente de una coordinación perfecta, para que el engranaje funcione, y sepa transmitir lo que se quiere, por qué se quiere y cuando se debe hacer.

Muchos de los problemas que surgen en los colegios entre las personas que conviven/trabajan en ese espacio durante tantas horas al día es por un lado, el vertiginoso ritmo de trabajo diario impartiendo clases a distintos niveles, teniendo además que preparar, explicar, atender, escuchar, en resumidas cuentas educar y por otro lado, carecer de una comunicación adecuada entre los miembros del claustro de cada centro, que cuando deciden comunicarse, la estrategia utilizada no responde a estas máximas en la comunicación:

¿Cómo decir lo que se pretende comunicar?

¿Cuándo decir lo que se pretende comunicar?

¿Por qué decir lo que se pretende comunicar?

¿Tengo razones para decir lo que se pretende comunicar?

¿Qué resultados pretendo obtener por decirlo?



En la actualidad para fomentar la comunicación e intentar mejorar la forma de trabajar en las empresas, han surgido los coaching en distinta áreas de la vida, para intentar obtener lo mejor de cada individuo en cada uno de los sectores, pero en el fondo qué es un coaching?, sino un canalizador de comunicación para aunar esfuerzos y energías de los miembros de una empresa o centro educativo, ayudando a reflexionar mediante el acompañamiento y formulación de preguntas, pero el coach no dice qué hacer, no receta fórmulas, ni soluciona problemas, solo hace preguntas a través de una comunicación fluida, para situarnos al principio del camino que se debe emprender, se le considera pues un facilitador pedagógico de procesos de cambio en las personas. Ese papel de facilitador de la comunicación lo deben ejercer los equipos directivos en los centros educativos y saber trasladar a todas las personas que trabajan en el colegio, la necesidad de potenciar una comunicación fluida, puesto que cuando trabajas en una institución educativa, todas las conversaciones que sirven para educar, forman parte de tu trabajo.

Para poder comunicarnos de forma efectiva en cualquier colectivo de personas que tenga una meta en común como son los colegios, lo primero que se debe hacer es escuchar, escuchar es querer comprender el mundo de la otra persona, escuchar no es oír, escuchar significa respetar y confiar en el otro y en sus capacidades.

De nada sirve que en un centro educativo hayan instalaciones maravillosas, si cada una de las personas que están en contacto con alumnos y familias van por su lado, impartiendo su materia en el nivel correspondiente, sin producirse las comunicaciones necesarias que transfieran la información precisa a las personas con responsabilidad, para tomar la decisión más conveniente en cada momento.

Es muy complejo sintetizar los factores que inciden en una buena comunicación dentro de cualquier colectivo, teniendo en cuenta que existen infinidad de formas de comunicarnos sin necesidad de utilizar la palabra, pues todos emitimos mensajes no verbales constantemente, desde la forma de vestirnos, hasta nuestro gestos o como nos desenvolvemos en los distintos espacios.

Por todo lo que he manifestado anteriormente, está claro que debemos cuidar más las distintas formas en las que nos comunicamos, en todos los ámbitos de la vida, puesto que los mensajes que transmitimos tienen unas consecuencias, y antes de actuar debemos pensar lo que transmitimos, para que su mensaje tenga el efecto deseado y no deje cadáveres por el camino.

Una comunicación eficaz y exquisita con todas las personas que están vinculadas a un colegio, denota un valor añadido de calidad, que quiera o no, repercute finalmente en la educación de los niños y en la satisfacción de las familias.

Asesor-Gestor Educativo.
Pórtico sur de las Cariátides en el templo del Erecteón obra del arquitecto Mnesicles S. V a.C

lunes, 14 de julio de 2014

EL APRENDIZAJE DE LOS NIÑOS EN VACACIONES.

Bajo las olas obra de Kanagawa 1830

Ignacio Pardo Luzardo*

http://www.laprovincia.es/opinion/2014/07/14/aprendizaje-ninos-vacaciones/620294.html 

Desde hace ya unas décadas está instituido en casi todas las familias en las que su economía se lo permite, el inscribir a sus hijos en los cursillos de verano o campamentos de verano presentados o camuflados de las formas más originales, con la intención de hacerlos atractivos y alternativos a lo que fue el ritmo de trabajo de 10 meses de curso escolar recién terminado. La razón fundamental es que los padres que pueden, tienen que trabajar en el mes de julio, y si no hay algún familiar que se haga cargo de los hijos durante ese período estival, hay que ingeniárselas para buscar una actividad lúdica que les ayude a los hijos a pasar ese mes de la forma más fructífera posible. Hay quienes aprovechan para reforzar en ese mes aspectos como el inglés a través de juegos en combinación con deportes, añadiendo montañismo, excursiones, piscina, acampadas en las que se incluye visión nocturna de estrellas, y un largo etcétera que la imaginación y el intentar enganchar a las familias pueda ayudar a convencer para que se matriculen a los niños en el mismo.

Dentro del amplio abanico de ofertas que aparecen, surgen a última hora algunos que queriendo alcanzar la luna, se han dado cuenta como si ahora, muchos descubrieran que la actividad de organizar el tiempo de ocio para los niños puede ser lucrativo y se lanzan a ofrecer cursos sin tener las mínimas garantías de ejecución de un proyecto, convirtiéndose al final dicho campamento de verano en una guardería para mantener a unos niños hasta que los padres dejen de trabajar, porque no se pueden quedar en casa solos.

Lo que si podemos constatar de forma fehaciente, es que la mayoría de los niños en los períodos vacacionales su tiempo no lo dedican precisamente al repaso de las materias estudiadas durante el curso, y que la mayoría de su tiempo libre (que es mucho), lo pasan delante de videoconsolas o de un televisor.

No planteo que los niños estén todo el día, en vacaciones con actividades vinculadas al mundo académico, pero lo que debemos tener claro es que durante los períodos vacacionales hay que fomentar en los niños actividades que mantengan su actividad cerebral activa.

También es necesario en verano que se estimule en los niños el desarrollo cerebral para que siga funcionando, a través de otro tipo de actividades que complementen las realizadas durante el curso escolar, y de esta forma sigan ejercitando las diversas capacidades. Como señala la psicopedagoga Ángela Prieto Gil”Está demostrado que el cerebro de los niños se desarrolla mejor, mientras más cosas diferentes le damos en que pensar, y si es a través del juego y la diversión mejor”. Hay que intentar estimular el aprendizaje mediante algo distinto a lo que han venido haciendo a lo largo del curso, salir de esa rutina es beneficioso si sirve para seguir aprendiendo. A veces pensamos que lo único que se les puede ofrecer está fuera del hogar y no es así, pues también en vacaciones, en casa pueden hacer actividades que se relacionen con fomentar su autonomía y valores personales como es la responsabilidad, el orden, la limpieza y la disciplina. Se les puede pedir ayuda para arreglar cosas, poner la mesa y otras cuestiones que requieran mayor responsabilidad de lo que habitualmente les pedimos.

Es importante que los niños sigan manteniendo hábitos diarios, y que no se descontrolen, para que cuando se reincorpore a su ritmo de clases, la vuelta no sea tan brusca. Ahora que los niños están más tiempo en casa, los padres deben intentar buscar estar más tiempo con ellos y buscar actividades entretenidas que puedan compartir, reforzando de este modo las relaciones familiares.

Todas las alternativas que impliquen un proceso de atención y aprendizaje son buenas: talleres, música, pintura, danza, lectura, teatro, deporte, idiomas, refuerzo educativo si lo precisara, realización de cuadernillos de verano, etc. Lo importante, es que el niño esté en contacto con otros niños de su edad, socializándose y potenciando estrategias de comunicación. Existen también otras formas de aprendizaje que no están vinculados necesariamente a un espacio físico concreto, a través de los viajes y las experiencias vividas en lugares distintos al que uno reside, pero para ello debemos insistir en que cuando se viaje con la familia, la mochila debe ir cargada de interés, ilusión y ganas por aprender y conocer la cultura, el arte, la gastronomía, las costumbres de otras ciudades o países, hay tiempo para todo si nos sabemos organizar y enseñar a nuestros hijos a disfrutar del paisaje, aunque haya momentos que no sea del gusto de todos, pero para ello es indispensable poner normas de uso de los aparatos electrónicos de entretenimiento y de juego que les puede impedir disfrutar del viaje.

El verano no puede suponer para los chicos una desconexión total respecto al proceso de aprendizaje, pues está demostrado por estudios de universidades americanas, que dejar de leer en verano, origina en el cerebro un retroceso entre dos y tres meses en destreza y a la vez, una pérdida de léxico.

Por lo comentado anteriormente sobre la pérdida de conocimientos adquiridos por no practicar en vacaciones, hay personas que cuestionan si el tiempo de vacaciones de verano de los niños es excesivo o no, ese es otro debate en el que tarde o temprano tendremos que entrar a nivel general, pero lo que debemos tener claro es que existe un agotamiento real de los niños después de diez meses de clases, y hay que hacer un paréntesis para iniciar con las pilas cargadas el curso siguiente, lo importante es facilitar el acceso para el aprendizaje y ayudar a los niños cuando se incorporen en su actividad escolar.

*Asesor- Gestor Educativo

Isabel de Portugal obra de Roger Van der Weyden hacia 1450



lunes, 7 de julio de 2014

TALIS Y CUALIS EN LA EDUCACIÓN

Carnation, Lily, Lily, Rose obra de John Singer Sargent 1886


Ignacio Pardo Luzardo*

http://www.laprovincia.es/opinion/2014/07/07/talis-cualis-educacion/618894.html

Hace días se hizo público el Estudio Internacional de la Enseñanza y el Aprendizaje, el llamado informe TALIS 2013, el estudio se basa en las opiniones de los profesores y de directores de centros, exponiendo su parecer sobre la situación educativa tal como la perciben, la profesión docente, las eficacias de las pedagogías utilizadas y su satisfacción laboral, proporcionando datos sobre aspectos que pueden ayudar a comprender la situación actual de los docentes en secundaria. En España participaron 3.339 profesores y 192 directores de 192 centros, de un total de 106.000 profesores encuestados. El estudio incluía preguntas sobre:

características del profesor

ambientes de trabajo

liderazgo

oportunidades de aprendizaje y desarrollo

evaluación y devolución de la información

prácticas pedagógicas y creencias

autoeficacia y satisfacción con el trabajo



En la breve presentación que hace, D. Ángel Gurría Treviño Secretario General de la OCDE desde el año 2006, señala en función a los resultados del estudio, que”la mayoría de los centros de enseñanza se mantiene fiel a la imagen y configuración propias de otra época, al tiempo que los docentes no siempre desarrollan las prácticas y competencias profesionales necesarias para dar respuesta a las distintas necesidades de los estudiantes hoy en día…” Todos sabemos que dependiendo de quién es el encargado de realizar un estudio, se hará más hincapié en la orientación de las conclusiones en un sentido o en otro y está claro que la OCDE, no es el paradigma de la pedagogía educativa del futuro, pero creo que de alguna manera este estudio, centra algunos aspectos de la eficiencia educativa actual, que puede ayudar a replantearnos aspectos curriculares y pedagógicos para mejorar nuestra forma de trabajar en los centros educativos con los alumnos.

Lo cierto, es que este informe aporta datos objetivos que se pueden medir a través de las respuestas emitidas por sus protagonistas y datos subjetivos sobre la satisfacción de los profesores y la imagen que la sociedad tiene de ellos, muchas de esas percepciones y opiniones son reflejo de todo lo que estamos viviendo actualmente en nuestra sociedad y el profesorado no está ajeno, al igual que ocurre con otras profesiones.

¿Quién debería leer el informe TALIS?, ¿qué información tiene este estudio que permita avanzar en la forma de dar clases, de avanzar en la educación o en la manera de mejorar el sistema educativo? ¿Quién debe aprovecharlo? Considero que dicho estudio, puede ser el inicio de una reflexión general en cada centro con su equipo de profesores, sobre lo que se está trabajando en el día a día en el ámbito docente con los alumnos y lo que deberíamos hacer para dotarlos de las herramientas necesarias para que se sepan desenvolver en el futuro. Por supuesto que el informe se podría mejorar de muchas maneras, entre otras, relacionándolo con los resultados del informe PISA también elaborado por la OCDE, pero eso me imagino será en otro año. Se pueden cuestionar muchas cosas de dicho estudio, como que se han homogeneizado las respuestas de todos los encuestados, sin tener en cuenta los distintos entornos de los docentes evaluados, pero también aporta datos que nos deben hacer pensar sobre la situación actual de la docencia en España en particular, dentro de nuestro mundo globalizado.

Hay un dato sorprendente entre otros, y es que según el estudio TALIS, existe un 40% de profesores que jamás ha recibido una evaluación externa, por lo que tenemos un porcentaje muy alto de profesionales de la educación, que nadie le ha dicho si está bien o mal lo que hace en su aula, nadie le pueda ayudar a mejorar en su trabajo. Los profesores debemos acostumbrarnos a ser evaluados en nuestra actuación en el aula, con la finalidad de mejorar. Si no tenemos a alguien que nos diga dónde nos equivocamos, seguiremos cometiendo el error, llegando a producirse un autismo pedagógico en la enseñanza, que genera incompetencia. Tenemos que acostumbrarnos a ser evaluados de forma periódica con la intención de aprender de nuestros errores, para no volver a repetirlos.

Como señala Jose Antonio Marina, “la calidad de un sistema educativo depende de la calidad de los profesores y depende de la calidad de los equipos directivos, todo lo demás lo puede favorecer, o lo puede perjudicar. Pero lo que un profesor hace en su aula, depende del profesor”. No podemos, ni debemos estar lamentándonos toda la vida de lo que nos ha tocado, que si niveles bajos, grupos conflictivos, burocracia administrativa, familias poco implicadas en la educación de sus hijos, etc.…, es lo que tenemos y partiendo de esa realidad hay que educar para mejorar a las personas que estamos formando. Hay que darle la vuelta al chip y pasar a la acción, sobreponiéndose a cualquier adversidad para garantizar que nuestros alumnos puedan optar con total garantía de éxito a cualquier decisión cuando finalicen sus estudios.

*Asesor- Gestor Educativo
La balsa de George Bush fotografía de de Joel Peter Witkin 2006